Bienvenidos a la cordillera Bética
Esta etapa nos introduce directamente en la cordillera Bética por donde discurrirán mayoritariamente las próximas siete etapas. La cordillera Bética, también conocida por su término en plural, cordilleras Béticas (debido a que está formada por un numeroso conjunto de sistemas montañosos más o menos aislados) se extienden por más de 600 km por el Sur de la península Ibérica desde la provincia de Alicante hasta la de Cádiz (Ver imagen en galería). En términos geológicos, la cordillera Bética continúa hacia el Noreste por debajo del mar Mediterráneo hasta las islas Baleares. La cordillera Bética es el resultado de complejos procesos tectónicos ocurridos durante las últimas decenas de millones de años (Cenozoico) enmarcados en un acercamiento general entre África y la península Ibérica de unos 5 mm al año.
La etapa comienza en Elche y discurre inicialmente en dirección Oeste-Este por una topografía suave sobre los sedimentos cuaternarios de los abanicos aluviales del entorno del río Vinalopó. Estos abanicos (así llamados por su forma de sector circular similar al del objeto con el que nos abanicamos) proceden de la erosión de las sierras de Crevillente, Elx y Colmenar situadas al Norte. Estas sierras, compuestas por rocas sedimentarias Mesozoicas, han sufrido un levantamiento reciente a favor de un gran accidente tectónico que atraviesa todo el sur de la península: el accidente Alicante-Cádiz, también conocido en este sector como la falla de Crevillente (Ver imagen en galería).
Cuando el recorrido se aproxima al mar en la bahía de Alicante, hacia el Sur se puede observar unos suaves relieves en forma de meseta redondeada que conforman la sierra y el cabo de Santa Pola. Se trata del arrecife fósil de Santa Pola una formación geológica de menos de 10 millones de años que se originó bajo las aguas del mar Mediterráneo en forma de arrecife de coral con una morfología muy parecida a la de un atolón (Ver imagen en galería). Hace unos 3 millones de años comenzó a emerger formando un cerro en la actualidad debido a que la roca caliza de estas estructuras bioconstruidas es más resistente a la erosión que las rocas del entorno.
Ya en la ciudad de Alicante, el trazado rodea el castillo de Santa Bárbara ubicado en un relieve formado por calcarenitas, unas rocas sedimentaria de origen marino bien estratificadas que forman la Serra Grossa. Estas calcarenitas fueron explotadas en una antigua cantera donde en la actualidad se ubica la estación del tranvía de la Sangueta. En las paredes de la cantera se puede observar un interesante sistema de fallas subverticales formadas en una etapa tectónica extensional relacionada con la formación del mar Mediterráneo (Ver imagen en galería).
Coordinador: Sergio Rodríguez García (Universidad Complutense de Madrid).
Colaboradores:
Elisabeth Díaz Losada (Instituto Geológico y Minero de España).
Julio Garrote Revilla (Universidad Complutense de Madrid).
Juan Miguel Insúa Arévalo (Universidad Complutense de Madrid).
Blanca Martínez García (Instituto Geológico y Minero de España).
Mónica Leonor Meléndez Asensio (Instituto Geológico y Minero de España).
Francisco Javier Rubio Pascual (Instituto Geológico y Minero de España).
Ángel Enrique Salazar Rincón (Instituto Geológico y Minero de España).