Dinosaurios, Carbón y Karst.
Aunque muy corta, esta etapa está llena de elementos geológicos de interés.
El comienzo de la etapa tiene lugar en la denominada “Costa de los Dinosaurios”.Durante el Jurásico (entre hace 200 y 145 millones de años) se desarrollaron en esta zona diferentes paleoambientes. En Rodiles se pueden reconocer depósitos marinos rítmicos, litorales y fluviales. Es en los materiales depositados en ambientes litorales donde se encuentran numerosas huellas de dinosaurios que recorrían esos ambientes de transición en busca de alimento. Muchas de esas huellas se encuentran catalogadas por el Gobierno del Principado de Asturias y protegidas bajo la figura de Monumento Natural. Algunos rastros son de excepcional importancia por su magnífica preservación. También aparecen restos óseos de diferentes reptiles como dinosaurios, cocodrilos y tortugas. Muchos de esos restos están recogidos y expuestos en el Museo del Jurásico de Asturias (MUJA), ubicado cerca de Colunga.
Vista aérea del Museo del Jurásico de Asturias (MUJA), con forma de huella de dinosaurio. (Google Earth)
Durante gran parte del recorrido de la etapa, recorremos el sector minero de carbón de la Cuienca Central Asturiana. En esta región se han explotado capas de carbón sedimentadas en gigantescos deltas y manglares durante el Carbonífero superior (hace 320 a 300 millones de años). Actualmente la minería del carbón en la región está prácticamente abandonada, pero ha marcado profundamente la fisiografía y la cultura de esta región. Al atravesar estos valles mineros, tendremos la oportunidad de observar los restos de las minas, unas de interior y otras a cielo abierto, que han sido o están siendo restauradas.
Parte de las estructuras dedicadas a la minería del carbón han sido aprovechadas para distintos usos. Entre ellos está la divulgación de esta actividad minera. El museo de la minería del carbón en el Entrego es un magnífico ejemplo de este uso.
Museo de la minería y la industria cerca de El Entrego. Foto Wilkipedia.
El cese de la minería de carbón conlleva que los huecos generados por las explotaciones mineras se inunden, dando lugar a un “almacenamiento de aguas subterráneas”. Estas aguas que presentan una temperatura constante se están aprovechando para la climatización de importantes edificios en Mieres.
Según nos acercamos al final de la etapa y nos metemos en terrenos del macizo del Aramo, pasamos a materiales del Carbonífero inferior (Hace 360 a 330 millones de años). Los materiales son en este caso rocas sedimentarias que se sedimentaron en plataformas de ambientes tropicales, dando lugar a las denominadas “calizas de montaña”. Estas calizas están sometidas a intensos procesos kársticos (cuevas, cañones, etc.). En la zona de la meta se aprecian unas praderas (denominadas localmente Llagos) situadas en pequeñas depresiones que corresponden a dolinas (huecos de disolución de las calizas), remodelados por el hielo de los glaciares y que constituyen hoy día excelentes zonas de pastos para el ganado.
Figura 8.4 La Sierra del Aramo, en la zona centro de Asturias, vista desde el famoso alto visitado por la Vuelta Ciclista a España en varias ocasiones. (Angelmiguel7 This file is licensed under the Creative Commons Attribution-Share Alike 3.0 Unported license.)
Coordinador: Sergio Rodríguez García (UCM)
Colaboradores: Elisabeth Díaz Losada (IGME) Julio Garrote Revilla (UCM) Juan Miguel Insúa Arévalo (UCM) Blanca Martínez García (IGME) María Belén Muñoz García (UCM) Francisco Javier Rubio Pascual (IGME) Ángel Enrique Salazar Rincón (IGME)
