Etapa 7. Andorra la Viella- Cerler Huesca la Magia.

En los primeros kilómetros de esta etapa se deshace parte del recorrido de la anterior a través del valle glaciar de río Valira. Pronto la carretera se orienta hacia el oeste para ascender el puerto del Cantó donde encontramos el primer punto de interés geológico.

Km. 140-150. Unos kilómetros al norte de la carretera que asciende al puerto del Cantó, en los alrededores del pueblo de Castellbó, se encuentran unos excelentes afloramientos del Cámbrico y Ordovícico (650-500 millones de años). Se trata de unas sucesiones rítmicas con alternancia de finas capas claras y oscuras que resaltan en las trincheras de las carreteras. Estas capas están doblemente deformadas por las orogenias Varisca y Alpina.

Km. 130-125. Tras bajar el puerto del Cantó, la etapa discurre por el valle del río Noguera Pallaresa. Al llegar a Gerri de la Sal se atraviesan terrenos triásicos de las facies Keuper, que consisten en arcillas con alto contenido en sales (Halita = ClNa y yeso = SO4Ca.2H2O). Las aguas subterráneas que atraviesan esos materiales salen al exterior con esas sales disueltas. Eso fue aprovechado en tiempos históricos para extraer la sal del agua mediante salinas. De ahí deriva el nombre de la población. Las salinas se encuentran en la llanura de inundación del río Noguera Pallaresa, entre el propio río, el pueblo y la carretera; aunque siguen activas, su producción actual es escasa y hoy son una interesante atracción turística que rememora la industria de tiempos pasados.

Km. 120-100. Tras pasar por Gerri de la Sal y antes de llegar a la Pobla de Segur, la carretera atraviesa un estrecho desfiladero, el Congosto de Collegats. Éste está formado a través de conglomerados de edad Eoceno superior-Oligoceno (entre hace 40 y 25 millones de años). Estos conglomerados se han depositado durante las fases tardías de la orogenia Alpina. En esa fase final, las montañas, todavía en formación, aportaban grandes masas de sedimentos en forma de torrenteras y abanicos aluviales. Estos sedimentos eran fundamentalmente conglomerados, en ocasiones con bloques de gran tamaño debido a la fuerte pendiente. De esta forma las zonas periféricas de las montañas se cubrían rápidamente de estas rocas. En la zona que nos concierne han recibido el nombre de conglomerados de la Pobla de Segur o de Collegats. La erosión posterior producida por el Noguera Pallaresa (desde finales del Mioceno, los últimos 8 millones de años) ha formado el llamado Congosto de Collegats, un paisaje geológico espectacular.

 Km. 75-70. A la altura de Gironella, descendiendo del puerto de la Cruz de Perves, se atraviesan materiales volcánicos de edad carbonífera que afloran especialmente bien al norte de la carretera, en la pequeña aldea de Erillcastell. Se trata de una sucesión de materiales ignimbríticos (depósitos clásticos producidos durante erupciones explosivas) de colores blancos y coladas andesíticas (vulcanismo de carácter intermedio, ni muy ácido ni muy básico). Este vulcanismo se produjo durante las fases más activas de la orogenia Varisca, en el Carbonífero superior o Pensilvánico (unos 300 millones de años). 

Km. 0. Dominando la estación invernal de Cerler, donde termina la etapa, se encuentra el macizo de la Maladeta. En esa zona quedan restos del glaciarismo cuaternario que afectó a estas montañas. Entre los pocos restos que quedan en los Pirineos de ese glaciarismo se encuentran los glaciares del Aneto y la Maladeta. Estos glaciares están en claro retroceso en consonancia con el calentamiento global que se está produciendo. Hace menos de un siglo estos pequeños glaciares todavía ocupaba gran parte de las laderas superiores del Aneto y de la Maladeta, pero hoy en día están reducidos a una pequeña superficie y su destino es la desaparición completa en unas decenas de años.